Había cierta expectativa en la previa de este primer partido, porque por muy amistoso que fuera, el recién asumido director técnico del primer equipo masculino de Universidad de Chile, se ha encargado de crear una atmósfera de optimismo de cara a la temporada que recién comienza.
En la conferencia de prensa previa a este duelo, ambos técnicos entregaron sus ideales a los medios, Miguel Ponce, apuntaba que su equipo estaba recién armándose, y Gustavo Álvarez, con una potente convicción, declaró al micrófono de «Radio AzulChile», que el quipo sería intenso desde el pitazo inicial frente a los de Plaza Chacabuco.
Y fue finalmente lo que sucedió, el equipo de Universidad de Chile saltó al campo de juego con la clara misión de desdibujar al su rival desde un inicio. El duelo traducía ese lenguaje en los primeros minutos cuando llegó la apertura de la cuenta, un zapatazo desde fuera del área, por parte del joven jugador azul Enzo Fernández, dejó sin opción alguna al portero hispano, decretando el primer gol del año para la «U» (9′).
Sin embargo, Universidad de Chile no descansaría en su afán de buscar el arco rival, en una jugada que partió desde la zona defensiva azul, Juan Pablo Gómez, filtró un pase por el sector derecho del ataque azul, que fue recibido por Leandro Fernández, quién mediante una vistosa jugada personal, se sacó sin problemas al arquero, y finiquitó con el arco a merced (35′).
Lo lamentable vino casi en el epílogo de la primera etapa, por consecuencias del juego intenso, y también por la extenuante pretemporada, Cristian Palacios acusó problemas físicos, y fue reemplazado por Nicolás Guerra. Quién dejó una grata impresión desde que ingresó, incluso marcó el tercer gol para los azules tras un centro bombeado, que vino desde el sector derecho por parte de Leandro Fernández (40′).
En la segunda etapa, la «U» cambió a casi todo el equipo, incluso con Marcelo Díaz desde un inicio, quién hizo su reestreno con la camiseta azul. El equipo siguió con la misma tónica impuesta en el primer lapso, y muestra de eso, en una jugada que nació en los pies del propio Díaz, y tras una conjunción de toques, Maximiliano Guerrero, finiquitó de manera óptima tras la salida del arquero rival, decretando el cuarto y último gol para los azules (48′).
Posterior a esto, el elenco local despertó, tras modificaciones de jugadores Unión Española equiparó el juego, tornándolo disputado. Y aunque Universidad de Chile pudo llegar al quinto gol, careció de efectividad en la puntada final.
Si bien se trató de un partido amistoso, y el primero después de la pretemporada, el saldo en la banca azul fue positivo. No habían puntos en disputa, ni alguna clasificación, sin embargo, el equipo entro con intensidad, hambre, una incesante lucha por buscar el arco rival, algo que Universidad de Chile no debería ni negociar.