Universidad de Chile tuvo la gran oportunidad ante su gente, de quedar como único puntero tras jugadas las primeras cinco fechas. El entorno adornaba una fiesta, a pesar de que se jugó un día lunes a las 19:00hrs, un encuentro que estuvo en la palestra, tras ser suspendido injustificadamente hace unas semanas por las autoridades respectivas.
Al frente estaba Club de Deportes Cobresal, elenco que había peleado el título de la competencia del año anterior, ante el ex equipo dirigido por Gustavo Álvarez. Y aunque en la presente campaña, el elenco nortino solo había sumado 1 punto en 4 partidos, ingresó al césped ñuñoino con la idea clara de rescatar puntos ante la «U».
El cuadro azul comenzó el partido de una forma soñada, recién se había dado el puntapié inicial, cuando llegó la primera ocasión de gol. Todo nació en los pies de Matías Zaldivia en la génesis de la jugada, la que terminó dentro del arco cobresalino tras un sorpresivo zurdazo de Cristian Palacios, tras ser habilitado por Israel Poblete desde la banda izquierda en el ataque (1′).
Todo era alegría para las 40.000 personas que colmaron el aforo permitido, sin embargo, el balde de agua fría vendría casi a la vuelta de la esquina. En una aproximación de la visita al arco azul, César Munder, clavó un potente zurdazo al segundo palo del arco custodiado por Gabriel Castellón, dejando estéril cualquier intento del guardameta azul por desviar el balón (6′).
La «U» seguiría en búsqueda del tanto que la hubiese colocado arriba en el marcador, de hecho, tuvo varias aproximaciones con peligro de gol en el arco de Leandro Requena, no obstante, la impericia de los azules, y lo atenta que estuvo la defensa minera, mermaron el intento del equipo azul de irse al descanso con la ventaja en el marcador.
En el segundo lapso, los pupilos de Gustavo Álvarez salieron con todo en búsqueda del anhelado segundo tanto. Fabián Hormazábal recibió un balón casi pegado al vértice del área grande por el sector derecho, haciendo una diagonal hacia dentro, sacó un remate extraordinario de zurda, que se coló en un ángulo, dejando a Leandro Requena sin opción alguna (52′).
Acá se pensó que Universidad de Chile enrielaba el rumbo, que había aprendido la lección de lo que sucedió en el primer tiempo tras la apertura de la cuenta, sin embargo, la pesadilla se repetiría nuevamente, cuyo protagonista sería el mismo antagonista. En una desinteligencia en la zaga azul, nuevamente César Munder, sacándose a Gabriel Castellón, definió con el arco a su merced (58′).
Minutos más tarde, Marcelo Morales estremeció uno de los verticales con un tiro con pierna derecha (63′), pero paulatinamente, el cuadro azul comenzó a decaer en intensidad, apostando al contragolpe, el elenco nortino esperaba replegado a Universidad de Chile, quién con varias sustituciones, y atacando con 4 jugadores en ofensiva, no pudo llegar al tanto que le diera los 3 puntos, lo que le hubiese permitido alcanzar la punta del torneo de forma exclusiva.