Universidad de Chile no fue capaz y así mismo, desperdició una nueva oportunidad de ganar un superclásico. No obstante, los niveles individuales de los jugadores dejaron algunas cosas buenas y sobretodo, otras malas. Debido al mal rendimiento que ha demostrado el equipo dirigido por Dudamel, Fernando de Paul viene siendo uno de los puntos altos y más regulares que tiene el equipo. En el partido de ayer, a pesar de haber recibido un gol, el arquero demostró seguridad y confianza en los momentos que le tocó participar.
Otro de los puntos altos que tuvo la U fue Osvaldo González, quien demostró seguridad y sobretodo velocidad cuando tuvo que enfrentar los mano a mano con los jugadores albos.
Pablo Aránguiz es un jugador diferente, que a pesar de haber entrado sobre el final del partido marcó una diferencia, incluso creando una clara ocasión de gol. Sin duda fue uno de los puntos altos que tuvo el equipo azul.
Pero lo gran mayoría de los rendimientos individuales en el plantel azul fueron bajos, y a eso también se debe la derrota. Por el otro lado, está Marcelo Cañete, jugador destinado a ser el distinto en la U, y que ayer, lamentablemente no se encontró con su juego, condicionando así el nivel de otros jugadores, como el de Joaquín Larrivey.
Camilo Moya es otro jugador que no estuvo a la altura del partido, incluso siendo condicionado tempranamente debido a una tarjeta amarilla que, a juicio de los hinchas, era totalmente evitable.
Sin embargo, el peor rendimiento en el cuadro estudiantil viene desde la banca, y es que Rafael Dudamel no ha logrado consolidad un estilo de juego, aún menos una alineación que se repita fecha tras fecha, situación totalmente relacionada con el mal juego de la “U” y dejando pasar nuevamente, una oportunidad de volver a ganar en el Estadio Monumental.
Simón Meza | Radio Azul Chile