Católica se quedó con la Supercopa al imponerse por 2-1 a Universidad de Chile, en un intenso y entretenido cotejo disputado ante un gran marco de público en el estadio alcaldesa Ester Roa de Concepción.
Los primeros instantes del compromiso fueron intensos y trabados, en el que ambos elencos quisieron imponer sus términos en el terreno de juego, no logrando superar a su rival. No obstante, con el correr de los minutos, tanto azules como cruzados pudieron soltarse y comenzaron a generar oportunidades de anotar.
Y la apertura de la cuenta llegó bien adentro del partido. A los 42’ Nicolás Castillo con un impecable golpe de cabeza abrió el marcador. Sin embargo, la respuesta azul no se hizo esperar y tras una desinteligencia en la última línea, Gastón Fernández con un cabezazo puso la paridad a los 44’.
Pero las emociones no terminaron y en la siguiente jugada, a los 46’, tras una notable jugada combinada entre Castillo y Buonanotte, José Pedro Fuenzalida tomó un balón y batió a Jhonny Herrera para marcar el 2-1 con que se fueron al descanso favorable a los precordilleranos.
En el complemento, los dirigidos por Sebastián Beccacece dominaron en gran parte las acciones y se metieron en terreno cruzado, pero careció de poder de finiquito al momento de enfrentar a la defensa y al portero Christopher Toselli.
Mientras, los pupilos de Mario Salas, apostaron a esperar a los laicos y salir rápidamente mediante el expediente del contragolpe para liquidar el partido, teniendo más de una ocasión para lograrlo, pero no tuvo puntería y cuando la tuvo, encontró la respuesta de Herrera, por lo que el tanteador no se movió más, sentenciando el triunfo 2-1 de la UC, que en menos de dos semanas, logró batir a la U en dos oportunidades, más el semestre anterior en San Carlos, peor que nunca está U.